Los pueblos más bonitos de la Sierra de Tramuntana, Aparthotel Playas Ca's Saboners

Valldemossa: Un pueblo con encanto


Valldemossa, con sus calles empedradas y edificios históricos, es una deleite para los cinco sentidos. Hogar de la famosa Real Cartuja de Valldemossa, donde Chopin y George Sand buscaron refugio, este pueblo rezuma riqueza cultural. Pasea por las pintorescas calles, visita los mercados locales y disfruta de la famosa coca de patata. Valldemossa tiene un encanto especial durante todo el año.


Deià: Donde el arte se encuentra con la naturaleza


Encaramado en una ladera con vistas al Mediterráneo, Deià es un paraíso para artistas y amantes de la naturaleza por igual. El pueblo, rodeado de olivares y huertos de cítricos, ha servido como inspiración para muchos artistas de renombre. Explora las estrechas calles adornadas con galerías de arte y no olvides visitar el Museo Robert Graves.


Fornalutx: Mediterráneo puro


Conocido como el 'Pueblo más bonito de España', Fornalutx es un paraíso mediterráneo en la Sierra de Tramuntana. Pasear por las estrechas callejuelas adornadas con bugambilias y geranios es como entrar en una postal. La plaza del pueblo, rodeada de cafeterías y tiendas locales, es el lugar perfecto para empaparse de la cultura mallorquina.


Banyalbufar: Serenidad junto al mar


Banyalbufar, situado en laderas escalonadas con vistas al mar, es un lugar tranquilo. Las antiguas terrazas, antes utilizadas para cultivar uvas, añaden un carácter único al pueblo. Disfruta de un paseo relajado por el laberinto de callejones, respira el aire salado del mar y disfruta de productos locales en restaurantes junto al mar.


Sóller: El paraíso de los cítricos


Anidado en un exuberante valle de naranjos y limoneros, Sóller es el paraíso de los cítricos. El viaje en tranvía vintage desde Sóller hasta el puerto es imprescindible, ofreciendo vistas impresionantes de las montañas circundantes. Explora la plaza del pueblo, visita la iglesia de estilo modernista y no te pierdas el helado de Sóller.


En conclusión, estos pueblos en la Sierra de Tramuntana no son solo impresionantes bajo el sol de verano; son tesoros durante todo el año esperando a ser explorados. Ya sea cautivado por la sinfonía cultural de Valldemossa, el atractivo artístico de Deià, el encanto floral de Fornalutx, la serenidad junto al mar de Banyalbufar o el paraíso cítrico de Sóller, cada pueblo es una un lugar único.